Hola, soy Daniel y quiero que veáis mi historia

LA FLORECITA TRISTE

Había una vez una Grayi Diphylleia que vivía en una parte de Japón muy calurosa. Ella estaba muy contenta, pero había algo que fallaba. Como allí no llovía, ¡no podía hacerse transparente!Todas sus amigas de Japón se burlaban de ella y, en consecuencia, se ponía a llorar. Todos los días recibía burlas y lloraba como una posesa. Varios meses de vida después, una hermosa mañana, un niño la escuchó llorar y le preguntó qué le pasaba. Ella le explicó que sin agua no podía hacerse transparente y, para colmo, allí no llovía nada. Entonces, el niño le dijo que estaba transparente y la florecita se puso más contenta que unas castañuelas. El niño se la llevó y la plantó en su pueblo. Allí llovía mucho y, cuando no llovía, lloraba para volverse transparente. Por ese motivo, la florecita triste pudo ser como sus amigas.

FIN